Después
de un pesado viaje en tren, caminata de la estación a casa cargados de
equipajes. Era el placer de viajar en aquellos lejanos tiempos de la foto.
Preciosa fotografía. Otra toma digna de enmarcar. Diego es todo un privilegio que estuvieras allí en tantas ocasiones para dejar testimonio de un tiempo tan cercano y lejano al mismo tiempo. Gracias
Muy buena la toma. Un gran paseo para estirar las piernas después de estar tanto tiempo sentado en el tren para llegar al destino. Seguro que a pesar de la lejanía del pueblo había muchos viajeros a los que les sacaba del apuro. Abrazos fuertessssssssss
Entonces se viajaba mucho en tren, un coche era un bien escaso. Si recuerdo un autobus que algunas veces hacía el servicio de la estación. Anónimo, un saludo.
Bueno, entonces no se comía mucho para rebajar las carnes andando, además cargados de equipaje. Sólo los viajantes contrataban los servicios de un señor que transportaba sus pesados maletones en un carrito tirado por un burro. Isa, un abrazo
¡Que lejana me parecía que estaba la estación!. Ahora, con todo lo que ha cambiado esta calle, me parece un buen paseo. Saludos.
ResponderEliminarPreciosa fotografía. Otra toma digna de enmarcar. Diego es todo un privilegio que estuvieras allí en tantas ocasiones para dejar testimonio de un tiempo tan cercano y lejano al mismo tiempo.
ResponderEliminarGracias
Muy buena la toma. Un gran paseo para estirar las piernas después de estar tanto tiempo sentado en el tren para llegar al destino. Seguro que a pesar de la lejanía del pueblo había muchos viajeros a los que les sacaba del apuro.
ResponderEliminarAbrazos fuertessssssssss
Cuando bajé del tren a mi lejana llegada a Don Benito, me encontré una imagen muy parecida a la de foto. !Y ha pasado tanto tiempo!
ResponderEliminarPedro, un saludo.
Entonces se viajaba mucho en tren, un coche era un bien escaso. Si recuerdo un autobus que algunas veces hacía el servicio de la estación.
ResponderEliminarAnónimo, un saludo.
Bueno, entonces no se comía mucho para rebajar las carnes andando, además cargados de equipaje. Sólo los viajantes contrataban los servicios de un señor que transportaba sus pesados maletones en un carrito tirado por un burro.
ResponderEliminarIsa, un abrazo