DON
BENITO. En los años 1964-65, se construyó el edificio de Procasa, casi en mitad
de la nada. Durante muchos años en las noches de invierno fue para los vecinos
toda una aventura llegar a sus viviendas: Agua,
barro y oscuridad formaban parte de esa aventura.
En aquellos años muchos hemos sufrido esta situación. Eran tiempos en que muchas averías del coche se arreglaban con una alambre y un alicate. En cuanto al coche del centro me parece que es un Renault Gordini ó Ondine. Saudos.
ResponderEliminarFue de los primeros bloques de viviendas, y se construyeron sin planificacion urbanistca. Con la planificación urbanística y en tiempo de la burbuja, los ayuntamientos hicieron su agosto, y muchos terminaron corropiendose.
ResponderEliminarSaludos.
intensa la realidad que toma el que sacó la foto
ResponderEliminarEste edificio es uno de los ejemplos de chabolismo vertical que desgraciadamente aun subsisten en nuestro pueblo. Debería ser demolido y sus habitantes compensados con viviendas dignas.
ResponderEliminarComo siempre, muchas gracias Diego por este magnífico blog.
Es cierto, en aquellos lejanos tiempos de la foto la vida no era tan buena y cómoda como lo es ahora. A los pisos de Procasa ni siquiera le pusieron ascensor.
ResponderEliminarPedro, un saludo.
No se sabe con que plan urbanístico se colocaron aquellos pisos en medio del campo. Si es verdad que en aquellos años le resolvieron el problema de la vivienda a algunas familias.
ResponderEliminarAnónimo, un saludo.
Bueno, la verdad que la realidad que muestra la foto no es la más bonita. Sin embargo, nos enseña lo que había entonces.
ResponderEliminarRECOMENZAR, un saludo.
En aquellos años se construyeron muchos edificios tipo Procasa, y con ellos crecieron ciudades y pueblos. Creimos que eran los primeros pasos de la modernidad y progreso.
ResponderEliminarAnónimo, un saludo.