Hace años, muchos años, por la mañana temprano las calles olían a pan recién salido del horno de leña. Entonces el pan tenía prestigio y se le tributaba el mismo respeto que a la vida. Porque tener pan era tener vida. Hasta la historia lo tiene presente en sus citas más humanas: ganarás el pan con el sudor de tú frente, el pan de cristo, contigo pan y cebolla, una torta como un pan, pan y vino, dame pan y llámame tonto, no sólo de pan vive el hombre, con pan las penas son menos, más largo que un día sin pan…Su fama esta presente en la literatura, en las citas, en los dichos populares y en el recuerdo de los estómagos vacíos de otros tiempos.
Un mendrugo era la alegría del hambriento, del niño y del perro. Subir unos céntimos el pan, podía convertirse en un grave conflicto público. Para conseguirlo, no pocas veces, había que formar en largas colas. Era entonces el alimento de subsistencia.
Pero hoy, lo han convertido en poco menos que un proscrito. En un enemigo de la dieta para mantener la figura, en una de esas cosas que quitan los médicos, sin estar seguros si es bueno o malo para la salud. Y se ven trozos tirados por las calles, en las papeleras y en los contenedores. Es que estamos en los tiempos de la abundancia, de la alimentación industrial porque la artesana es cosa de pobres. El pan ahora lo fabrican por tiempos, se cuece y se vuelve a cocer, se calienta y se vuelve a calentar. Ya no huele a pan, huele a gasolina, a alcohol a periódicos… Se cuece en cualquier parte y se vende en cualquier sitio.
Los jóvenes nunca conocerán el sabor del pan recién hecho
¡¡Veníte a la Argentina, que todavía se vende el pan con olor a pan!!
ResponderEliminarHermoso texto.
mariarosa
Me encanta el pan,todos los tipos de pan....a la porra con las dietas de pan¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarUn abrazo
Siento tener que contradecirte, Diego. Si te paseas por los blogs de cocina de la red comprobarás que la inmensa mayoría de ellos cuenta con un apartado dedicado al pan. De unos pocos años a esta parte hay una corriente de panaderos caseros amantes del pan que reivindican el buen pan y elaboran en su propias casas distintos tipos de pan, incluso cultivando ellos mismos la levadura o masa madre natural. Te lo dice una de ellos.
ResponderEliminarSaludos.
Me pirra el pan aunque este duro, me lo como de todos los sabores, para mí es como las pipas, un vicio!!
ResponderEliminarBesitos Disan.
Una excelente entrada, y muy cierta, ahora el pan no sabe a pan sino a plastico...menuda diferencia con el pan de pueblo reciente que yo lo cogia y no lo podia dejar, yo por edad si he conocido los dos tipos de pan y la diferencia es notoria. Disancor, no te digo mas porque es de los dias que peor estoy de la espalda, menos mal que mañana cojo vacaciones aunque sea una semana.
ResponderEliminarUn Abrazo
Es seguro que en algunos sitios se seguirá haciendo pan casi como el de antes, pero donde no se cueza en hornos de aquellos viejos y con leña, sobre todo de jara, habrá mucha diferencia en el olor y el sabor. Y como alimento, ya parece que no es un artículo de primera necesidad como lo era antes.
ResponderEliminarA todos, os deseo un descansado, divertido y feliz fin de semana.
Un abrazo.
¡Jopé!, ¡qué razón tienes y qué triste me quedo!
ResponderEliminarQuerido disan, llevas razón en que el pan en antiguo horno de leña es mucho mejor que en los industriales, ese que todavía hacen en algunos pueblos, no el que se congela y luego se mete en el calentador de pan para que parezca recién hecho.
ResponderEliminarEn muchas partes del mundo seguirá siendo de primera necesidad, aquí es que nos falta hambre y además hemos perdido la cordura.
Buen fin de semana.
Hola Disancor, que razón tienes. Yo sí he comido ese pan recién hecho. Envolvía todo el ambiente del pueblo en un agradable olor a pan recién hecho.
ResponderEliminarPodía durar dos días sin ponerse chicle, ni tampoco duro.
Pero el pan de ahora deja mucho que desear. Y eso que el pan es caro. En mi pueblo una barra normal cuesta 80 céntimos.
En mi pueblo desgraciadamente ya no hacen pan en la tahona. Fallecía el panadero. Ahora lo traen de otro lugar. Y si no se compra de este pan que hay prefabricado, congelado que se mete en horno eléctrico. Nada que ver con el horno de leña de toda la vida.
Saludos y un fuerte abrazo