miércoles, 11 de noviembre de 2009
CONSUMO DE ALCOHOL
El consumo de alcohol, como cualquier otra droga, si no se controla adecuadamente se convierte en un problema grave para la sociedad, la familia y uno mismo. Pero el problema no se arregla criticando y afeando la conducta del bebedor. Es ahí cuando empieza lo malo. Se da cuenta que para relacionarse y competir en algunos campos de la vida, necesita del alcohol, y comienza a beber a escondida. Hasta que llega un momento que sin la ayuda de la bebida es incapaz de enfrentarse a la lucha de cada día. Se lo beberá todo, de las bebidas normales pasará a beber las peores, las más baratas y con mayor concentración de alcohol. No importa ni la calidad ni el sabor, lo que importa es el efecto que hace. El efecto que hace. Se ha convertido en medicina, en un jarabe con un sabor muy desagradable, eso piensan con la primera copa o el primer vaso de vino de la mañana. Unos ya salen bebidos de casa y otros, salen temprano a buscar el bar amigo, donde un camarero, gran conocedor de las debilidades humanas, le sirve su dosis de medicina.
Los hay que tienen botellas de alcohol escondidas en los sitios más insospechados, y que compran donde creen que pueden pasar más desapercibidos. No faltan los camareros cómplices que sirven vino en vaso de te o en botella de cerveza. Aguzan el ingenio, porque tiene que ser horrible cuando necesitan la medicina y no saben como conseguirla. Todos hemos oído de casos que se han bebidos frascos de colonia.
Para un bebedor la falta de alcohol tiene que ser terrible, y es impresionante como cambia una persona, de una personalidad pasa a la contraria, y como van dejando de relacionarse mucho, a estar solos.
La solución al problema esta en ellos. Tienen que aprender a aceptarse como son, sin alcohol, con las diferencias y limitaciones de un ser humano. Cada cual es como es, y listo. Si no estas capacitado para ir en una dirección, pues, ve en otra, pero no te apoyes en falsas ayudas, como el alcohol, porque duran poco y, al final, con pésimos resultados. Y si un día tienes que tomar una copa, que sea por placer y nunca por necesidad. Y la sociedad que siga buscando formas de combatir el alcoholismo. No se puede pedir que sean más tolerantes con ellos. Sin embargo, los conocedores del problema y los arrepentidos deben de ser algo pacientes, y si tienen la condición de enfermos, que los traten como a tales, sin menoscabo de su dignidad. Quienes fueron alcohólicos saben el terrible drama que padece el bebedor.
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Las drogas (legales e ilegales) en un consumo abusivo lo único que nos dejan expeuesta es la necesidad de escondernos de nosotros mismos. Nos refugiamos en sustancias que no nos benefician para no pensar. Y ahí comienzan a aparecer los problemas. Que tema.
ResponderEliminarCariños!
Pues sí Disancor, todos los que sufren alguna dependencia deberían ser tratados como enfermos. Aunque la realidad es que sólo son tratados así cuando deciden curarse, mientras están inmersos en ese pozo la gente suele volver la mirada a otro lado.
ResponderEliminarPor cierto, aún sigo comvaleciente pero estoy mejor, sólo me queda acabar con la tos y listo! Muchas gracias por interesarte por mi salud.
Un abrazo
Debe ser horrible sentir esa dependencia ... no pensar nada más que en una sola cosa: el alcohol(en el desayuno, en el trabajo, por la tarde, noche ... a todas horas)sin importar la familia, el trabajo, los amigos y lo mas importante:TU MISMO...
ResponderEliminarUn saludo
Ut
Desconozco el tema pero pienso que lo primero es aceptar el problema para buscar solución, pedir ayuda a especialistas y que la familia apoye, no critique, o acuse, sólo ayude.
ResponderEliminarBuena entrada para reflexionar,
Buenas noches
Cualquier depencia tiene que ser terrible, porque no eres tú, es el alcohol o la sustancia la que dirige tú vida, una vida a la deriva. Triste.
ResponderEliminarSol_Inaginario Desesperación, un saludo,
Celebro tú restablecimiento.
ResponderEliminarSí, el alcoholico es un enfermo. El alcohol va minando nuestra voluntad de forma muy sibalina, ya que se bebe en muchos acotecimientos de nuestras vidas, y al menos que tengamos cuidado, un día nos encontramos atrapados por sus garras.
Estamos siempre en peligro y nunca podemos decir que esto no me pasará a mi
silver´smoon, un abrazo
Ut, pienso que el bebedor no tiene vida sin alcohol. Todo gira en torno al vaso. Y lo triste es que el problemas se ha extendido hasta los jóvenes, y parece que no hay fácil solución.
ResponderEliminarSaludos,
Llevas razón, primero conocer el problema para buscar una solución. Todo menos apartar como a un apestado a quién tiene el problema. Lo primero que enferma es la voluntad, y necesita un poco de comprensión, y mucha ayuda de los demás.
ResponderEliminarEmibel, un saludo,