martes, 20 de abril de 2010

LOS PENDIENTES

Me encontraba parado en la puerta de un negocio de compraventa de oro. A mi lado se pararon, a lo que me pareció, un matrimonio joven y una señora mayor. Como estaban tan cerca no pude evitar oír lo que hablaban. Le chica joven la decía a la más vieja, llamándola madre, que para que quería, con su edad, los pendientes de la abuela, que era mejor venderlos y con el dinero arreglar el coche que lo tenían estropeado en el taller. La madre se resistía y repetía una o otra vez que aquellos pendientes los había recibido de su madre, que a su vez los recibió de la suya, y que ella pensaba dejárselos a ella, su única hija, a su muerte. De cuando en cuando intervenía el que parecía el marido de la joven, al principio argumentando razones por las que se debe hacer la venta, para terminar amenazando con malos modos. La hija volvía a la carga tratando a toda costa de convencer a la madre, pero esta no cedía y decía que la habían llevado hasta allí engañada. La discusión subía de tono, con muchas amenazas y echando cosas en cara. La hija acabó diciendo que no quería los pendientes y que se los echarían en la caja cuando se muriera. Pero al mismo tiempo la empujaban de forma violenta para que entrase en el negocio de compraventa de oro. Ya en la puerta giró la cara hacía mi, con los ojos llenos de lágrimas, y le vi los pendientes, imagino, motivos del conflicto, colgando de sus orejas. Y me pregunté:¿llegarán a violentarla quitándole los pendientes para venderlos?

Estamos deshumanizados, sólo tiene valor aquello que se pueda cuantificar para convertir en dinero. Los sentimientos y recuerdos no se pueden tasar poniéndole precio, pero se tasan y se venden todos los objetos que motivan los recuerdos. No importa si se borran generaciones de historias familiares. Están en crisis los valores sentimentales y en alza los monetarios.

¿Lucirá todavía los pendientes aquella señora?

27 comentarios:

  1. Es ciertamente triste ver una imagen asi,pero por otro lado tampoco es comprensible la postura de quien quiere llevarse sus joyas a la tumba o de cederlos en herencia a quien no los quietre.Un refran dice que lo que se han de comer los gusanos,que lo disfruten los humanos.Y si bien es cierto que a menudo nos encariñamos con objetos que nos recuerdan a alguien (y o soy el primero en hacerlo) en otras ocasiones resulta aconsejable saber desprenderse de laas cosas.
    dicho lo cual estoy completamente de acuerdo contigo en que hoy en dia los valores monetarios priman sobre los sentimentales.
    Un abrazo

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  2. Uff que historia más dura...

    no soy nadie para juzgar al joven matrimonio, seguramente tenían apuros económicos serios, aún así el trato a la anciana me parece cruel. Los sentimientos no tienen precio, y para ella no se trataba de unos pendientes, se trataba de lo que esos pendientes significaban para ella.

    Siento muchísimo que haya personas commo el matrimonio joven, que no cuiden y mimen a sus ancianos, lo siento por los ancianos, pero sobre todo lo siento por ellos, porque llegarán a viejos también y lo que han sembrado lo recogerán con creces.

    Mil besos

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  3. Si me veo en tu lugar, hubiera entrado en la tienda y hubiera comprado yo los pendientes, para que la abuela pudiera ponérselos y recuperarlos cuando quisiera.
    Qué duro. Cómo la vida misma.

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  4. En los momentos difíciles, en los que la supervivencia está en juego, parece que todo vale. No nos damos cuenta de que hay una diferencia entre el valor y el precio de las cosas.
    Cuántas historias como ésta se estarán viviendo en estos momentos de crisis...
    Un abrazo.

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  5. Es triste la pérdida de esos valores sentimentales…
    Buen escrito.

    Un placer leerte.

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  6. Pues si, yo también estoy de acuerdo en que es triste la perdida de los valores sentimentales, pero sobre todo esa manera de forzar a la madre a desprenderse de algo que tiene un hondo valor sentimental... creo que aunque tuvieran el coche en el taller esperando a repararlo siempre pueden buscarse otras alternativas menos violentas digamos, igual hasta el propio matrimonio tendría otras cosas que podría haber vendido para sacar dinero, no sé me parece egoista la postura de la hija y no digamos del yerno. También estoy de acuerdo con lo que dice Mercedes, ¿en cuantas coyunturas díficiles nos están poniendo todos estos que han generado la Crisis a costa de enriquecerse ellos?
    Una Buena Entrada Disancor. Abrazos

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  7. y para arreglar un coche? hay que joderse

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  8. DISANCOR...no creo que quisiera hacerlo,pero a veces,las circunstncias económicas obligan.Cuando ,por esta maldita crisis ,las deudas te comen ,y aunque el dolor te coma por dentro...hay que subsistir.
    una pena pero es la realidad.
    Besos.

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  9. Yo creo que no tenían necesidad de esa violencia contra la abuela.
    Lo primero, los pendientes eran suyos. Y al parece unos pendiente con valor sentimental y monetario.

    Con el primer no, deberían de haberla dejado tranquila y haber respetado su decisión. Es una violación y un atropello a la decisión de la abuela, y a ese no querer desprenderse de algo muy importante para ella.
    Cuando alguien nos dice NO, ese NO es una negación y por lo tanto un desacuerdo en algo. Y es un deber respetarlo.

    Si la pareja necesitaba dinero para reparar el coche, que pidan un préstamo, o saquen el dinero de debajo de las piedras. Seguro que si la abuela hubiera visto que necesitaban dinero para comer, o para pagar medicinas, ella misma los hubiera empeñado, por muy doloroso que hubiera sido quedarse sin esos pendientes.

    Creo que nos estamos deshumanizando, y prima el dinero antes que los sentimientos. Y creo que la falta de respeto brilla en algunas personas por su ausencia.

    Realmente debió de ser una escena penosa. Yo en esa situación llamo al 112 y pido auxilio para la abuela.

    Saludos y un abrazo.

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  10. Si ese matrimonio tenía problemas económicos no creo que tan solo unos pendientes pudieran salvarlos por muy ricos que fueran.
    Por otro lado, me indignan actuaciones de este tipo, esa señora seguramente se había ganado con su comportamiento la herencia de los pendientes, cosa que su hija no. Y el yerno, ¿qué pinta ahí?
    Qué desfachatez!!!
    Por cierto lo describiste tan perfectamente que parecía verse la escena.
    Buen día, amigo. Un beso.

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  11. Maldito dinero!!! como habrás visto hay veces que puede con los sentimientos. La historia de esos pendientes tienen una valor mucho más grande que cualquier arreglo de un coche u otra cosa material.

    Espero que la mujer aún pueda lucir sus pendientes y estar orgullosa de llevarlos por el significado tan grande que tienen para ella.

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  12. ¡Joder! de que mala Hostia me has puesto con lo vivido y aquí narrado.


    Un abrazo

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  13. Disancor: El último comentario de silver´smoon es mío, compartimos ordenador en el trabajo y sin darme cuenta lo he escrito con desde su blog.

    lo siento

    Un abrazo

    Ut

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  14. Complementte de acuerdo, pero es muy triste que el dinero haya sustituido de forma tan brutal a los sentimientos.
    juanjo, un abrazo.

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  15. Justo, no siempre es el valor de las cosas lo importante, es lo que representan. Según parece los pendientes llevaban muchos años en la familia, y ahora se vendían para arreglar un coche Incompresible para nosotros, los más sentimentales.
    silver, un beso.

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  16. Comprarle los pendientes y régalárselos es lo que hubiera pedido el corazón, pero ese es remedio para el momento, porque ya lo hubieran vendido en otra ocasión.
    mariajesusparadela, un saludo.

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  17. Es verdad, en estos momentos de crisis cuantos recueddos se habrán convertido en dinero, tan necesario para seguir viviendo. Es una pena.
    Mercedes, un abrazo.

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  18. Es lo que trae el progreso, ese cambio de setimientos ,es bueno todo lo que se puede hacer dinero. Ni los recuerdos valen nada.
    salvadorpliego, un saludo.

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  19. Hoy se ven muchas historias tristes de malos tratos de hijos a padres, de como se apoderan de sus pertenencias, de como les dejan sin nada. Entonces, el caso de esta señora es uno más de tantos. Triste, pero así esta la vida.
    mariaje 15, un beso.

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  20. Pues sí, hay que joderse. Si hubiera sido para comer, bueno, pero duele desprenderse de un recuerdo para arreglar el coche. El coche es el progreso, los pendientes el recuerdo.
    Nieves, un beso-

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  21. Es verdad, nunca sabemos las razones que llevan a las personas a hacer determinadas cosas. Quizás el coche fuese el medio de vida de aquella pareja. Quien sabe.
    MORGANA, un beso.

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  22. Ganas no me faltaron de prestar ayuda a la señora, pero en cosas de familia es mejor no meterse, se puede empeorar la situación, y un hecho pequeño se puede covertir en algo descomunal.
    isa,un abrazo.

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  23. Parece que el problema era el coche, que lo querian resolver con la venta de los pendientes.
    Hoy no se le tiene mucho apago a las cuatro cosas que guardan los mayores como recuerdo, si tienen valor, pues, hala, se venden.
    Enibel, besos.

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  24. Bueno, yo también estoy en el grupo de los sentimentales y de los románticos, me importan mucho más los sentimientos que el dinero, y por eso entiendo menos el desprecio a los recuerdos de la señora de los pendientes.
    Luna, un beso.

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  25. También yo espero que la señora pueda seguir luciendo el recuerdo de su familia, y que un día lo luzca su hija, y así du nieta y... Lo que demostrará que los sentimientos han prevalecido por encima del dinero.
    Ut, un abrazo.

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  26. Montxu, así es la vida y así son los tiempos que nos han tocado vivir. Hoy no se le tiene mucho apego ni a personas ni a cosas.
    Un abrazo.

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  27. Q post más bello, Dis..! He podido imaginar su rostro.., el rostro de quien tiene el corazón herido..

    Las almas insensibles no pueden apreciarlo..

    Para ella, para quienes todavía otorgamos importancia a detalles q para much@s son
    insignificantes.., va dirigido este abrazo..

    Gracias por publicarlo! Me emocionó..!

    Male.

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