En los años en que se hizo la foto, era habitual ver escenas como esta en los tranquilos pueblos de Extremadura, con parecidos personajes y semejantes temas de conversación. En este caso, es fácil adivinar lo que se contaba, teniendo como testigos un perro galgo y una escopeta.
Si la foto fuera actual no me sorprendería nada.
ResponderEliminarTodavía hay casas con puertas dobles (tienen su encanto); señores con boina; señoras con delantar y chaqueta y señor con zapatillas de franela... En los pueblos pequeñitos, incluso en algunas calles del pueblo no demasiado transitadas, me consta que conversaciones se siguen dando, y quizás algunos de los tema sea la caza y las presencie un galgo.
Un saludo.
Daniela Haydeé.
Pd: por una vez voy a ser la primera.
Qué foto tan entrañable! Esas largas charlas en la puerta de la casa y seguramente con ese rico olorcito a comida de pueblo tan rica, hummm....
ResponderEliminarBesos Disan.
La foto es de la Siberia Extremeña de los años 70, pero, es verdad, todavía se ven escena parecidas. Hay pueblos pequeños que ni la gente ni las costumbres han cambiado mucho.
ResponderEliminarFeliz domingo.
Daniela Haydeé, un saludio.
Lo que más sorprende de las fotos con estas escenas, es lo tranquila que vivía la gente en los pueblos. No sufrían agobios ni había prisa.
ResponderEliminarTe deseo una feliz tarde de domingo.
ion-laos, un beso.
Charlaban de caza, ¿verdad?
ResponderEliminarLa verdad que se les ve felices y tranquilos con sus cosas y sin la sensación de estar molestando en la calle a los transeúntes..., bueno, yo hablo de una ciudad claro, en un pueblo supongo que seguirán siendo felices a su ritmo.
Besitos.
Se nota que tienen todo el tiempo del mundo por delante. ¡Quién pudiera!
ResponderEliminarBesos
Llegado el otoño uno de los temas de conversación en extremadura es la caza. Hay muchos cotos y mucha afición a ese deporte.
ResponderEliminarcampoazul, un beso.
Eso es verdad, la gente tiene todo el tiempo del mundo. A diferencia de las ciudades que todo es prisas, correras y agobios. Es envidiable la tranquilidad de los pueblos.
ResponderEliminarMaría, un beso.
Muy buena la foto. ¿Sabes Disancor? Me recuerda mucho esta foto a la pelicula de Milana Bonita; Los santos inocentes. Toda la desolación de un cortijo en la Extremadura de los años 70, y las humillaciones de los señoritos, y la humillación a la servidumbre.
ResponderEliminarPreciosa la foto, aunque da algo de escalofrío la escopeta en mano.
Saludos y un fuerte abrazo
Creo que la película de LOS SANTOS INOCENTES se desarrolló muy cerca de Mérida. Es la película que mejor refleja la vida de Extremadura de aquellos años de señoritos, caciques y de trabajadores, y sus familias, humillados.
ResponderEliminarIsa, un abrazo.