Desde los carteles, los candidatos a Diputados por el Tercio Familiar parecen vigilar la industria de la señora que se gana la vida vendiendo chucherías en un cochecito de niño. Este tramo de los portales tiene la historia de Galerías Preciados, tienda que en aquellos años de los 60-70, hasta su desaparición en los 80, daba prestigio comercial a Don Benito
Amigo Disancor! En mi blog te dejé un regalito, jejeje. Si al entrar te sale un cartel de contenido malicioso, no le hagas caso, pone "proceder de todas maneras", porque solo es un problema de google, pero de virus nada. Abrazo grande, amigo, te quiero.
ResponderEliminarUna actividad honesta, típica de las recovas en Bs As, también. Lástima que los haya matado la urbanidad y la especulación impositiva que necesitó enmarcarlos en locales de cemento muy costosos para los artesanos, dejando todos los oficios en manos de mercaderes que, hoy por hoy, revenden artículos industriales extranjeros; muchas veces a costa de explotación infantil y esclavización en los países "Made in".
ResponderEliminarObserve las manos de la dama, tienen Amor en su hacer.
http://enfugayremolino.blogspot.com/
Sus fotos siempre traen recuerdos de mi infancia.
ResponderEliminarUn besote.
Años 70... "el carrico" verde donde me compraban siempre las chucherías. Estas fotos siempre traen recuerdos de los que hacen sonreir.
ResponderEliminarTe mando besos... y...un montón de chucherías compradas en algún "carrico" verde virtual que haya por ahí.
Vagamente pero recuerdo a estas entrañables vendedoras de chuches. Ahora todo lo venden en los chinos...
ResponderEliminarBesitos Disan.
Entré en tú blog y me encontré con la maravillosa sorpresa de mi foto artísticamente coloreada. Cualquiera diría que es de las primeras fotos que se hicieron en color. Muy contento y muy agradecido por el detalle.
ResponderEliminarmarcus, un abrazo.
Pues sí, es una pena que hayan desaparecido de las calles y las plazas aquellos puestecitos y carritos de chucherías. Ahora todo es a lo grande, y hasta las pequeñas cosas las explotan negocios importantes.
ResponderEliminarsoylauraO, un saludo.
Son imágenes entrañables las de esa forma de ganarse la vida. Y por muy increíble que parezca, había mucha gente que vivía teniendo a los niños como los principales clientes.
ResponderEliminarODRY, un beso.
Gracias por las chucherías virtuales que me envías. Se te olvidaron las castañas asadas, tan propias del tiempo que nos espera. Castañeras ya se ven muy pocas, y las que se ven, no son como las de antes.
ResponderEliminarMaría, un beso.
Pues si recuerdas vagamente aquellos carritos de chucherías, es que tienes la suerte de ser muy joven. Hoy, parece que son los chinos los que se van haciendo con el monopolio de las cosas pequeñas, aunque a aquella clientela de niños también le han cambiado los gustos.
ResponderEliminarion-laos, un abrazo.
Además de ser grandes comercios, son grandes lugares para cobijarse cuando llueve. Para que los comercios vendan y las gentes compren. Son edificios históricos por todo el tiempo que llevan hechos y lo que recogen de historias sus columnas.
ResponderEliminarDisancor, la foto muy interesante.
Que tengas un lindo fin de semana
Saludos y un fuerte abrazo
De un pequeño puestecito de chucherias a grandes negocios. Los tiempos lo ha transformado todo, inchuidos los gustos. Los niños ya consumen más hamburguesas que caramelos.
ResponderEliminarIsa, un abrazo.
Os deseo a todos un feliz fin de semana.
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