A la entrada de la Ermita había gigantescos eucaliptos que daban abundante sombra y a cuyas ramas subían los jóvenes para contemplar el panorama.
Día de campo, de romería o de gira, con mesa improvisada o mantel en el suelo, donde se disputaban el espacio, el vino, el chorizo, las chuletas, las tortillas, la ensaladilla y el pan y las nueces compradas a la llegada.
Estoy siguiendo las fotos de la celebración de la virgen de las Cruces, es entrañable ver las fotos de hace casi 40 años.
ResponderEliminarSeguro que disfrutabas mucho la celebración de la patrona de San Benito, me imagino que este tipo de recuerdos son lo que ponen en tus labios la sonrisa que siempre guardamos, esa que comentabas en mi entrada.
Un saludo
Me alegro mucho qe te gusten las fotos de las Cruces. Las fotos antiguas son algo así como el tiempo en conserva. !Es maravilloso que podamos contemplar cosas que ya hemos vivido! Dan fe de que fuimos y estuvimos allí.
ResponderEliminarGracias,silver´moon, por haberle dedicado siquiera un pensamiento a mi trabajo.
Un saludo muy cordial.