Aquellos detalles,
son estos recuerdos.
Desde la altura con
sus caras de papel, los políticos ponen media sonrisa para la foto que dejara
constancia que también ellos estuvieron en la calle pidiendo votos a cambio de
promesas al hombre que trabaja o al que pasa indiferente
Sonrisa de políticos, duran los que dura una campaña.
ResponderEliminarSaludos.
mariarosa
Soy como ese tonto del cuento al que le señalan la Luna y le mira el dedo.
ResponderEliminarLo digo porque se me ocurre decir que en la sombra del hombre que pasa indiferente, tú has encontrado el mejor lugar para dejar tu firma.Un saludo.
¡Cuánta credibilidad han perdido los políticos! Si es que alguna vez tuvieron alguna.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Disancor muy buena la foto histórica.
ResponderEliminarDigo como María Rosa, sonrisa y palabras de político, duran lo que dura la campaña.
Aunque antes eran más elocuentes y cumplían sus promesas, porque de un tiempo a esta parte, se queda todo lo dicho en aguas de borraja.
Saludos y un abrazo fuerteeeeeeeeee
Es verdad, los políticos en campaña son muy amables y simpáticos hasta con los que no tienen cara de votante, pero por si acaso. Pasadas las elecciones se convierten en personas serias e importantes.
ResponderEliminarMaría Rosa Giovanazzi, un beso.
Pues, no me dí cuenta donde ponía la firma, pero no es mal lugar una buena sombra. He acertado de chiripa, aunque se puede pensar que soy yo el indiferente.
ResponderEliminarA.J.O.,un saludo cordial.
Después de tantos años de dictadura los políticos democráticos eran una especie desconocida, hoy que los conocemos, estamos muy desencantados. Y sin embargo, nunca hemos dejado de pensar que también los hay buenos.
ResponderEliminarAntorelo, un abrazo.
ResponderEliminarLas promesas en un programa electoral deberían de ser de obligado cumplimiento, y castigar si no se cumple lo prometido como se castigan los incumplimientos en la publicidad de los negocios- Pero los políticos mienten con descaro y no pasa nada.
Isa, un beso.