Villanueva de la Serena. Escena de un día de Nochebuena de 1973. El guardia de tráfico ordena los aguinaldos que le van obsequiando los conductores con motivo de las Fiestas Navideñas.
Hola, es un baúl de los recuerdos, estas dos últimas son muy bonitas, en estos tiempos sería un milagro ver un asno esperando a su dueño, o un coche como el de la foto, y los aguinaldos que ya son parte de la historia, muy boniotos estos recuerdos. Publiqué ayer y de nuevo no se ha actualizado, lo siento, me desanima bastante. Un abrazo Ambar
Plaza de Maura o Pasaderas y, al frente, la calle Gabriel y Galán; la casita más baja de la derecha era un negocio de cordelería, resto de los tiempos en que, en Villanueva, el cáñamo y el esparto eran un cultivo más y de los más necesarios para fabricar accesorios indispensables en la vida diaria.
Los semáforos fueron un empeño, algo ridículo, de la corporación presidida por el entonces alcalde Manuel Romero-Cuerda (después presidente de la Diputación Provincial) para dar un barniz de modernidad al pueblo. No eran muy necesarios, como se ve.
Un saludo, D. Diego. Este va a ser el blog de mi infancia recuperada. Gracias.
Para los que ya somos viejos, es una alegría poder disfrutar de los recuerdos de nuestro tiempo, y para los jóvenes, curiosas lecciones de historia en imágenes. AMBAR, un abrazo
Lástima no haber podido publicar una foto actuar para comparar con la de hace cuarenta años. Sólo así podríamos apreciar como ha cambiado esa céntrica calle. Hoy más moderna, porque faltan los negocios viejos, las casas bajitas, los SEAT 600, el guardia con casco y también el aguinaldo. Cuando apenas había coches, hubo responsables municipales de algunas poblaciones que llenaron sus calles de semáforos como signo de modernidad y progreso. Eran muy previsores. El villano en su rincón, un abrazo.
En los años de la foto, muchas personas que vivían de algún servicio al público, hacían tarjetas por Navidad que decían; el cartero, el fontanero, el barrendero, el portero, el---LE DESEA FELICES FIESTAS. Pero esas cosas ya solo son recuerdos. María Rosa Giovanazzi, un beso.
La verdad que el aguinaldo de Navidad era un bonito detalle con las personas que te habían prestado un servicio durante todo el año. Creo que esa costumbre ha desaparecido, además ya no hay en las ciudades guardias de tráfico. ion-laos, un beso..
Anda, mira que chulos eran. Antes había otro espíritu y las personas estaban, estábamos más unidas y había otra cordialidad con las autoridades. Ahora no regalamos ni los buenos días. Saludos y un abrazo fuerteeeeeeeeee
Hola, es un baúl de los recuerdos, estas dos últimas son muy bonitas, en estos tiempos sería un milagro ver un asno esperando a su dueño, o un coche como el de la foto, y los aguinaldos que ya son parte de la historia, muy boniotos estos recuerdos.
ResponderEliminarPubliqué ayer y de nuevo no se ha actualizado, lo siento, me desanima bastante.
Un abrazo
Ambar
Plaza de Maura o Pasaderas y, al frente, la calle Gabriel y Galán; la casita más baja de la derecha era un negocio de cordelería, resto de los tiempos en que, en Villanueva, el cáñamo y el esparto eran un cultivo más y de los más necesarios para fabricar accesorios indispensables en la vida diaria.
ResponderEliminarLos semáforos fueron un empeño, algo ridículo, de la corporación presidida por el entonces alcalde Manuel Romero-Cuerda (después presidente de la Diputación Provincial) para dar un barniz de modernidad al pueblo. No eran muy necesarios, como se ve.
Un saludo, D. Diego. Este va a ser el blog de mi infancia recuperada. Gracias.
POR AQUÍ SIGUE SUCEDIENDO. EN LAS ESQUINAS, EN LOS BANCOS, EN TODOS LADOS HAY REGALOS PARA LAS FIESTAS.
ResponderEliminarMARIAROSA
Cómo se ha perdido esa tradición. Nosotros esperábamos a mi padre con mucha ilusión, y venía él tan contento con un sobre lleno.
ResponderEliminarBesos muchos Disan.
Para los que ya somos viejos, es una alegría poder disfrutar de los recuerdos de nuestro tiempo, y para los jóvenes, curiosas lecciones de historia en imágenes.
ResponderEliminarAMBAR, un abrazo
Lástima no haber podido publicar una foto actuar para comparar con la de hace cuarenta años. Sólo así podríamos apreciar como ha cambiado esa céntrica calle. Hoy más moderna, porque faltan los negocios viejos, las casas bajitas, los SEAT 600, el guardia con casco y también el aguinaldo.
ResponderEliminarCuando apenas había coches, hubo responsables municipales de algunas poblaciones que llenaron sus calles de semáforos como signo de modernidad y progreso. Eran muy previsores.
El villano en su rincón, un abrazo.
En los años de la foto, muchas personas que vivían de algún servicio al público, hacían tarjetas por Navidad que decían; el cartero, el fontanero, el barrendero, el portero, el---LE DESEA FELICES FIESTAS. Pero esas cosas ya solo son recuerdos.
ResponderEliminarMaría Rosa Giovanazzi, un beso.
La verdad que el aguinaldo de Navidad era un bonito detalle con las personas que te habían prestado un servicio durante todo el año. Creo que esa costumbre ha desaparecido, además ya no hay en las ciudades guardias de tráfico.
ResponderEliminarion-laos, un beso..
Anda, mira que chulos eran. Antes había otro espíritu y las personas estaban, estábamos más unidas y había otra cordialidad con las autoridades. Ahora no regalamos ni los buenos días.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo fuerteeeeeeeeee