Don Benito
Como si no hubieran
pasado cuarenta años, así recuerdo el bar Rincón Pío. Es dar marcha atrás al
tiempo para recuperar felices momentos de copas, amistad y charla. Dándoles
movimiento a las cosas y vida a las personas que nos sirvieron, como solo se
sirve a los amigos. A ellos y a la memoria que me permite recordarlos, gracias.
Aún queda algún bar donde se charla tranquila y amigablemente con el propietario del mismo. Me fijo en las pocas botellas que hay...no había mucha variedad...
ResponderEliminarSaludos.
Hola he visto tu comentario en mi blog. Me vas a seguir? Mi blog es http://pepitas-de-oro.blogspot.com
ResponderEliminarRecuerdo vagamente, ese olorcillo peculiar que tenían entonces los bares, y aunque se permitía fumar, el trato era más cercano, que es lo fundamental.
ResponderEliminarBesos Disan.
Recordar es ser agradecidos. Siento curiosidad si aún existe este bar aunque con distintos propietarios se entiende. Tenía aspecto moderno.
ResponderEliminarBss
En los tiempos a que se refiere la foto, este era un bar que abría temprano, más bien de madrugada, donde tomaban café los trasnochadores y los que iban al trabajo a esa hora de la mañana.
ResponderEliminarPedro, un saludo.
ResponderEliminarTu blog me parece muy interesante. Te prometo que siempre que pueda me tendrás entre tus comentaristas. Me gusta estar con las personas que inician algún proyecto.
rubén, un saludo.
ResponderEliminarBueno, los bares de antes eran mucho más acogedores y familiares. La gente bebía, charlaba y fumaba apoyada en la barra. Ahora todo esta más limpio, más pulcro, con algunas prohibiciones, pero más frío y donde uno se siente más cohibido.
ion laos, un abrazo.
Sí, ese bar existe. Aunque ha cambiado varias veces de propietario y también de clientes. Durante algunos años se intentó que fuese para jóvenes. Hoy, sin embargo, tiene parroquianos de todas clases.
ResponderEliminarKaty Sánchez, un beso.
¡Hola, Diego!. ¡Qué emoción ver esa foto!. Por motivos familiares (nuestro tío Pepe que trabajó tantos años en ese lugar) es un lugar que nos trae un montón de recuerdos, ahora me viene el aroma de aquel café fuerte y delicioso...Gracias por traernos estos cachos de memoria...
ResponderEliminarUn saludo y a seguir....
El Señó Emilito Enrea, hacía muy buenos tratos y era un referente en el Rincón Pío
ResponderEliminarLa verdad que en ese paseo por los recuerdos de Don Benito no podía olvidarme del Rincón Pío, ni mucho menos de Joaquina, Pepe, Antonio y tantos buenos camareros y mejores amigos que pasaron por allí.
ResponderEliminarMe alegro que la foto de hoy te haya traído el feliz recuerdo de tu tío Pepe.
Inma Limón, un saludo.
Es cierto, el Rincón Pío era el sitio más conocido para charlar y hacer tratos. Don Benito tuvo muy buenos tratantes. Se merecen un recuerdo y, por mi parte, lo tendrán en cuanto se me venga a la mano una foto.
ResponderEliminarAnónimo, un saludo.