No me gusta el Otoño como estación pero indiscutiblemente sus colores son mágicos y reconfortantes. Fotografiar esa luz que reverbera sobre los amarillos y ocres de las hojas es un placer. Pisar la hojas caídas me resulta muy nostálgico. Seguro que la llevas grabada en la retina. Bss
Espero que siga igual de bien cuidado como se ve en la foto. Me gusta más el verano por la alegría que tiene, los meses de frío no me gustan nada y me vienen fatal para la artrosis.
Bonita fotografía esta tomada desde lo que llamábamos la rosaleda,conozco el parqué como la palma de mi mano,pues pase en el toda mi infancia y parte de mi juventud,por lo que me trae muchas añoranzas.enhorabuena Diego por tu magnífico trabajo .
Bueno, es verdad que cuando hice la foto tú eras una niña, pero todavía lo eres. Te queda mucho tiempo para ser vieja, y además, muchos otoños bonitos que ver y disfrutar. Isa, un abrazo.
Los colores del otoño son muy agradables a la vista, y producen sensaciones de paz y nostalgia, como un alto en el camino antes de la llegada del invierno, año nuevo y vuelta a empezar. Maria Rosa Giovanazzi, un beso.
La vida y sus costumbres cambian, sin embargo, la naturaleza permanece, y esos colores otoñales son como los de hace cuarenta años, y como los de siempre. Sin embargo, aunque siempre lo miremos igual, la edad hará que los veamos de otra manera. Katy Sánchez, un beso.
La vida cambia y nosotros envejecemos, pero el tiempo va y viene en una marcha inalterable, y así la naturaleza nos da siempre imágenes y colores muy parecidos. Mos, un abrazo.
Hay que reconocer que los meses de frío son más incómodos y más perjudiciales para cualquier dolencia, sin embargo, a mí me agota mucho el calor y es por lo que prefiero el frío del invierno. ion-laos, un beso-
El Parque, a pesar de lo grande que es, lo tienen muy bien cuídalo. Es uno de los lugares más bonito e importante de Don Benito. Han hecho otro, pero el Parque siempre será "El Parque" Pedro Luis López Pérez, un abrazo.
Si, la foto esta tomada desde la rosaleda, una especie de pérgola que había allí. Algunas cosas de las que se ven en la imagen ya han desaparecido. Pero el Parque sigue siendo igual de bonito. Me alegro que disfrutes con los recuerdos. Manuel, un abrazo.
En otoño este parque sigue teniendo los mismos colores que tenía cuando hice la foto hace cuarenta años. La verdad que es la imagen de una agradable melancolía. María, un beso.
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ResponderEliminarAhhhhhhhhhhh, qué bonito disancor. Desde entonces ha llovido mucho. Tenía 12 añitos.
ResponderEliminarSaludos y besos
Escribí y me salió mal.
ResponderEliminarTe decía que es un paisaje dorado, bien otoñal, bello recuerdo.
mariarosa
No me gusta el Otoño como estación pero indiscutiblemente sus colores son mágicos y reconfortantes. Fotografiar esa luz que reverbera sobre los amarillos y ocres de las hojas es un placer. Pisar la hojas caídas me resulta muy nostálgico. Seguro que la llevas grabada en la retina.
ResponderEliminarBss
El tiempo pasa, la vida cambia, Diego, pero el otoño siempre tendrá hermossos colores.
ResponderEliminarUn abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Espero que siga igual de bien cuidado como se ve en la foto. Me gusta más el verano por la alegría que tiene, los meses de frío no me gustan nada y me vienen fatal para la artrosis.
ResponderEliminarBesos Disan.
Hace dos años estuve allí y está bastante cambiado, pero mantiene su misma esencia, su misma fragancia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bonita fotografía esta tomada desde lo que llamábamos la rosaleda,conozco el parqué como la palma de mi mano,pues pase en el toda mi infancia y parte de mi juventud,por lo que me trae muchas añoranzas.enhorabuena Diego por tu magnífico trabajo .
ResponderEliminar¡Qué bonitos los colores de otoño! Ese árbol que está en primer plano tiene unos colores preciosos.
ResponderEliminarBesos
Bueno, es verdad que cuando hice la foto tú eras una niña, pero todavía lo eres. Te queda mucho tiempo para ser vieja, y además, muchos otoños bonitos que ver y disfrutar.
ResponderEliminarIsa, un abrazo.
ResponderEliminarLos colores del otoño son muy agradables a la vista, y producen sensaciones de paz y nostalgia, como un alto en el camino antes de la llegada del invierno, año nuevo y vuelta a empezar.
Maria Rosa Giovanazzi, un beso.
La vida y sus costumbres cambian, sin embargo, la naturaleza permanece, y esos colores otoñales son como los de hace cuarenta años, y como los de siempre. Sin embargo, aunque siempre lo miremos igual, la edad hará que los veamos de otra manera.
ResponderEliminarKaty Sánchez, un beso.
La vida cambia y nosotros envejecemos, pero el tiempo va y viene en una marcha inalterable, y así la naturaleza nos da siempre imágenes y colores muy parecidos.
ResponderEliminarMos, un abrazo.
Hay que reconocer que los meses de frío son más incómodos y más perjudiciales para cualquier dolencia, sin embargo, a mí me agota mucho el calor y es por lo que prefiero el frío del invierno.
ResponderEliminarion-laos, un beso-
ResponderEliminarEl Parque, a pesar de lo grande que es, lo tienen muy bien cuídalo. Es uno de los lugares más bonito e importante de Don Benito. Han hecho otro, pero el Parque siempre será "El Parque"
Pedro Luis López Pérez, un abrazo.
Si, la foto esta tomada desde la rosaleda, una especie de pérgola que había allí. Algunas cosas de las que se ven en la imagen ya han desaparecido. Pero el Parque sigue siendo igual de bonito.
ResponderEliminarMe alegro que disfrutes con los recuerdos.
Manuel, un abrazo.
ResponderEliminarEn otoño este parque sigue teniendo los mismos colores que tenía cuando hice la foto hace cuarenta años. La verdad que es la imagen de una agradable melancolía.
María, un beso.