Muy bien conservada esta foto a pesar de los años transcurrido. El color suele estropearse con el tiempo.Muy alegre, me encantan los mercados por su colorido.
Me gustan mucho los mercados, más que las grandes superficies, aunque tienen tendencia a desaparecer, por éstas últimas. En Madrid, muchos se han tenido que modernizar para no perder clientela.
Ayer fui al fisio, a darme otro masaje en los masajes, me estan tratando lo de morderme la lengua y la rigidez de la mandíbula, y llegué a casa a las diez y media, por eso no me pasé por aquí.
Antes los productos del mercado venía de las huertas del pueblo y de otros cercanos. Era comida sana y economía local. Variedades autóctonas, con sabor. Hoy vienen desde muy lejos, gestionados por multinacionales, llenos de pesticidas, herbicidas... y solo con forma y color. Pero faltos de sabor y sabiduría hortelaana.
Aquellas Plazas de Abastos eran encantadoras por el bullicio y el colorido. No eran tan cómodas como los modernos hipermercados, pero tenían un algo muy especial y muy cercado a la gente Katy Sánchez, un beso.
El mérito de esta foto radica en el colorido de los productos de verano, y la verdad que a pesar del tiempo transcurrido, la imagen no ha perdido ni brillantez ni contraste. Marinela, un saludo.
Los resultados de la rehabilitación siempre son a largo plazo, por lo que es seguro que a ti la fisio te producirá los efectos deseados. Sólo que hay que tener mucha paciencia. Las Plazas de Abastos, con tantas reformas y tanta competencia, han perdido aquél sabor que tenían antes a pueblo, aún estando en una gran ciudad. ion-laos, un beso.
Es verdad, antes los productos del campo venían directamente de la huerta, arrancados de la tierra la tarde anterior. Eran sanos y ecológicos, además de baratos. La imagen de las Plazas de Abastos la podemos ver en fotos, pero la esencia se perdió para siempre. Anónimo, un saludo.
Para mi, cuando yo era un chiquillo, era normal que mi madre con su bolso ir casi todos los días a la Plaza de Abastos y la charla con unos y con otros y vuelta a casa con su bolso lleno de viandas pues entonces había pocos carritos de la compra. La foto tiene un valor grande debido a los recuerdos que nos traen de otros tiempos con menos estrés que ahora,Saludos
Claro que sí, yo era de uno de ellos, que iba casi siempre, cogido de su mano y enseñandome todo lo que había que hacer, para comprar barato, el "tira y afloja", era muy normal, eso de hacer esas cosillas, en fin me trae buenos recuerdos, ...
Para las amas de casa ir a la Plaza de Abastos era la mejor forma de empezar el día. El bullicio, el tira y afloja con los vendedores, el rato de charla o intercambio de saludo con amigos y conocidos...Era la vida que bullía en los puestos y el ir y venir de la gente. Era otra forma de vida. Antonio, un saludo.
Me gustan mucho los colores de la fruta y verdura de los mercados. Y también me gusta la manera de comprar en un mercado, es una pena que hoy día no tengamos tiempo para comprar así.
Así es. Hoy la gente no tiene tiempo para hacer con tranquilidad la compra en una Plaza de Abastos. Por otra parte, ya no se madruga tanto como se madrugaba antes. La vida ha cambiado mucho. María, un beso.
Hola Disancor, se ve mucha actividad en el mercado. Y el color es como un manojo de arco iris esparcido por cada rincón del lugar. Muy buena la foto. Saludos y un abrazo
La foto parece una acuarela. Me encantan los mercados por ese colorido tan variado.
ResponderEliminarBss y buen finde
Muy bien conservada esta foto a pesar de los años transcurrido. El color suele estropearse con el tiempo.Muy alegre, me encantan los mercados por su colorido.
ResponderEliminarSaludos.
Me gustan mucho los mercados, más que las grandes superficies, aunque tienen tendencia a desaparecer, por éstas últimas. En Madrid, muchos se han tenido que modernizar para no perder clientela.
ResponderEliminarAyer fui al fisio, a darme otro masaje en los masajes, me estan tratando lo de morderme la lengua y la rigidez de la mandíbula, y llegué a casa a las diez y media, por eso no me pasé por aquí.
Buen finde Disan, muchos besos.
Antes los productos del mercado venía de las huertas del pueblo y de otros cercanos. Era comida sana y economía local. Variedades autóctonas, con sabor.
ResponderEliminarHoy vienen desde muy lejos, gestionados por multinacionales, llenos de pesticidas, herbicidas... y solo con forma y color. Pero faltos de sabor y sabiduría hortelaana.
Aquellas Plazas de Abastos eran encantadoras por el bullicio y el colorido. No eran tan cómodas como los modernos hipermercados, pero tenían un algo muy especial y muy cercado a la gente
ResponderEliminarKaty Sánchez, un beso.
ResponderEliminarEl mérito de esta foto radica en el colorido de los productos de verano, y la verdad que a pesar del tiempo transcurrido, la imagen no ha perdido ni brillantez ni contraste.
Marinela, un saludo.
ResponderEliminarLos resultados de la rehabilitación siempre son a largo plazo, por lo que es seguro que a ti la fisio te producirá los efectos deseados. Sólo que hay que tener mucha paciencia.
Las Plazas de Abastos, con tantas reformas y tanta competencia, han perdido aquél sabor que tenían antes a pueblo, aún estando en una gran ciudad.
ion-laos, un beso.
Es verdad, antes los productos del campo venían directamente de la huerta, arrancados de la tierra la tarde anterior. Eran sanos y ecológicos, además de baratos. La imagen de las Plazas de Abastos la podemos ver en fotos, pero la esencia se perdió para siempre.
ResponderEliminarAnónimo, un saludo.
Para mi, cuando yo era un chiquillo, era normal que mi madre con su bolso ir casi todos los días a la Plaza de Abastos y la charla con unos y con otros y vuelta a casa con su bolso lleno de viandas pues entonces había pocos carritos de la compra. La foto tiene un valor grande debido a los recuerdos que nos traen de otros tiempos con menos estrés que ahora,Saludos
ResponderEliminarClaro que sí, yo era de uno de ellos, que iba casi siempre, cogido de su mano y enseñandome todo lo que había que hacer, para comprar barato, el "tira y afloja", era muy normal, eso de hacer esas cosillas, en fin me trae buenos recuerdos, ...
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ResponderEliminarPara las amas de casa ir a la Plaza de Abastos era la mejor forma de empezar el día. El bullicio, el tira y afloja con los vendedores, el rato de charla o intercambio de saludo con amigos y conocidos...Era la vida que bullía en los puestos y el ir y venir de la gente. Era otra forma de vida.
Antonio, un saludo.
Me gustan mucho los colores de la fruta y verdura de los mercados. Y también me gusta la manera de comprar en un mercado, es una pena que hoy día no tengamos tiempo para comprar así.
ResponderEliminarBesos
ResponderEliminarAsí es. Hoy la gente no tiene tiempo para hacer con tranquilidad la compra en una Plaza de Abastos. Por otra parte, ya no se madruga tanto como se madrugaba antes. La vida ha cambiado mucho.
María, un beso.
Hola Disancor, se ve mucha actividad en el mercado. Y el color es como un manojo de arco iris esparcido por cada rincón del lugar.
ResponderEliminarMuy buena la foto.
Saludos y un abrazo