miércoles, 24 de febrero de 2010
EL REGRESO
Con un salto en el calendario, aquí lo dejé y aquí lo empiezo de nuevo. Aunque la vida sigue, para mí como si nada hubiera pasado, la misma rutina, los mismos sueños. Ni siquiera mis historias han mejorado, aunque las cuente con renovado entusiasmo.
Amigos blogueros, seguidores amigos, con un saludo y mis mejores deseos, empiezo:
Mal cronista para tan feliz acontecimiento.
Una de las cosas que más satisfacción y alegría me produce es cuando la familia se reúne con motivo de algún acontecimiento, sobre todo, de una celebración, claro. Pienso que hay que aprovechar cualquier oportunidad para repartir unos saludos, unos abrazos, unos besos, unas palabras, un interesarse por la vida de nuestros allegados. Intercambiar y ponernos al día de acontecimiento. De ver como han crecido los niños y han envejecido los mayores. Hasta para dar y pedir explicaciones, arreglando diferencias o deshaciendo mal entendidos. Y al fin, todos contentos en animadas charlas y en sonoras risas. Y una de las mejores ocasiones para crear este ambiente, son las bodas. Todo el mundo esta predispuesto a pasarlo bien, no en balde nos hemos colocado el traje de las fiestas, y si guapos van ellos, mucho más guapas van ellas, como esta mandado. Así, más o menos, ha sido mi caso, pues ha habido un feliz acontecimiento en mi familia. Se ha casado uno de mis hijos en una bonita ceremonia. Novia de blanco, esplendorosa novia, mucho más de lo que yo pueda acertar a describir con palabras, y dando vistosidad al acto padrinos, oficiante e invitados. El “si quiero” de los novios y el “!viva los novios!” de los invitados. Todas las bodas son parecidas, pero emocionan de distinta manera, dependiendo de la parte que tengamos en ellas. También se desarrollan de parecidas formas, banquetes, baile, cubatas y hasta cante, si el cuerpo lo pide. Y fotos, muchas fotos, que un día darán fe del acto y serán el mejor recuerdo.
Mi mujer, madre del novio, fue la madrina y el padre de la novia el padrino, como viene siendo costumbre.
Los padres vamos quedando solos poquito a poco, es ley de vida, también quedaran nuestros hijos llegado el momento. Aunque ya las personas son más independientes, no hay la idea de familia que había antes. Las costumbres no son mejores ni peores, son distintas. Siempre queda, sin embargo, la nostalgia.
Otra pareja que empieza a caminar junta con los sentidos puestos en el futuro, tejiendo proyectos, planes y sueños. Sin miedo a los obstáculos, sin tregua al desaliento. Es nuestro deseo.
Este fue el reportaje de boda, que si le ponéis imaginación, yo me ahorro palabras.
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Regresaste! Bienvenido dis...! Se notó tu ausencia y se te extrañó!
ResponderEliminarY gracias por hacer de un momento cotidiano en la vida de muchas personas algo tierno y dulce!
Mis mejores deseos para tí, y para tu familia!
Un fuerte abrazo!
Malena
Bienvenido, las bodas son buenos acontecimientos para reunir a la familia que por las circustancias que sea no la podemos ver como deseamos de frecuente, disfruto de ellas, y lo paso realmente bien.
ResponderEliminarEs ley de vida que los niños abandone el nido y hagan su propia familia, pero tranquilo se va una pero vienen dos a comer, visitaros etc.
Con cariño
Mari
Disancor!!!! que alegrón por Dios!!!! que ganitas de verte por aquí.
ResponderEliminarMe alegra que el motivo de tu partida haya sido algo tan agradable como la boda de tu hijo, por lo que cuentas disfrutaste de lo lindo jjeje.
Un beso regordo y bienvenido!!!!!
Que lindo leerte de nuevo querido Disancor!!!!!
ResponderEliminarTe tenías guardada la noticia del casamiento eh! ja ja.. La gente aún se casa... Felices de ellos.
Los padres nunca estarán solos, de hecho, son los únicos que pese a cualquier circunstancia estarán allí, firmes y dispuestos a ese abrazo a que tanto necesitamos los hijos, en las buenas y en las malas.
Muchos cariños!!! Que alegría que estés de nuevo aquí!
Bienvenido amigo!
ResponderEliminarMe alegro de tu regreso. Yo también he estado un tiempo ausente. Emibel sigue pero volverá en breve.
Felicidades por la boda de tu hijo, seguro que lo pasasteis bien. Con tan buena crónica no hacen falta fotografías.
Un abrazo.
Emibel te envía besos gordos.
Enhorabuena y como no, Bienvenido!!!!
ResponderEliminarDebe ser muy emocionante casar a un hijo, echar un vistazo atrás y ver como ha crecido, como diseña y moldea su vida, ver con quien la comparte, sus proyectos e ilusiónes.
Un abrazo fuerte
Ut
Se da por buena tu ausencia.
ResponderEliminarY mi más sincera enhorabuena. Después ya sabe lo que toca disfrutar/sufrir a los nietos, que los padres hoy en día están muy atareados.
Malena, me alegra mucho, como siempre, tú presencia y comentario. Cada día estoy más enganchado a vosotros, a una amistad sin rostro, pero llena de sentimientos. Cada día me cuesta un poquito más escribir, y sin embargo, estoy contento. Luchar es estar viviendo.
ResponderEliminarUn beso.
Sí, es una buena ocasión para estar con la familia que se reune en estos felices acontecimientos, y contarse cosas que con el paso de tiempo han ido ocurriendo.
ResponderEliminarYa tenemos los hijos casados. Soy muy viejo, tengo hasta nietas mayores. Es la vida.
Mari, un beso.
Hola, pues, aquí me tienes. Me gustaria poder contante lo bien que lo he pasado, para que veas que también los viejos nos desmelenamos de cuando en cuando montando una juerga, aunque no este uno para muchos trotes, y en la boda de un hijo le tengan a uno siempre vigilado. Pero las bodas son divertidas, no sé si práticas.
ResponderEliminarY lo bonitas que vais las mujeres vestidas de novias!
silver, muchos besos. Un descansado, feliz y divertido fin de semana.
Todavía la gente se complica la vida casándose, aunque ya hay cada vez menos bodas, y sobre todo, por la iglesia. Yo estaré un poco atrasado, seré un romántico, pero me gustan las mujeres vestidas de novias, por la hermosura de la mujer y no por la ceremonia. Es la imagen de los sueños.
ResponderEliminarSol, un beso cordial.
Muchas gracias por tú felicitación. Y celebro que, Emibel y tú, hayais tenido unos días de ausencia del lugar de rutina diaria, y desear que lo hayais pasado bien. Enviale mis saludos a Emibel y mis mejores deseos.
ResponderEliminarEmilio un abrazo.
Nuestra vida se va marcando con los acontecimienntos que en ella van ocurrienddo, y la boda de un hijo es, quizás, uno de los más notables. Con cada uno parece que se pierde algo, aunque no sea así, pero así se siente.
ResponderEliminarUt, un abrazo. Gracias por tú bienvenida.
Fiebre, gracias por tú enhorabuena. Y ahora,como bien dices, a cuidar nietos. Es verdad, los padres de hoy parecen menos padres por necesidades de la vida, ocupando el puesto los abuelos, que como los de hoy nunca los ha habido.
ResponderEliminarUn beso.
Se me olvidó.
ResponderEliminar!!!Feliz fin de semana a todos!!!