martes, 5 de enero de 2010

LOS REYES MAGOS


Los reyes de los niños pobres caben en unos viejos zapatos. Los camellos vienen cargados de regalos de marcas para los niños ricos. Los Reyes Magos no entienden de clases sociales, pero si de dinero. No son racistas, uno es negro. Viajan en camellos, para vender el oro negro. Aquellos los guiaba la estrella de oriente, a estos la luz de los grandes almacenes. Es la alianza de Oriente y Occidente. Seguro que ya hasta olvidaron que hubo un niño, un belén y un pesebre. Eso fue tradición, esto es negocio. De aquella tradición, sólo quedan los niños pobres.

Pensamientos de una persona mayor conocedora del valor del dinero.

Pero los sueños, los deseos y las ilusiones de los niños no tienen precio, y para ellos todos los regalos que hayan soñado, que los Reyes Magos se dan por bien pagados con vuestras risas y la alegría de vuestros ojos..No habrá carbón, sólo regalos.

14 comentarios:

  1. Preciosa entrada Disancor.. Que lindo sería que existan de verdad y repartan regalos tal como los pequeños se merecen, a todos por igual...
    Muchos cariños amigo!

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  2. Yo esta noche la dejo para los niños, pero no obstante creo en la ´magia de esta noche y sigo dejando mis zapatos por si cae algo, y unas galletitas para los camellos y los reyes.

    Un abrazo.

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  3. Voy a contarte uno de los regalos que quiero: seguir leyéndote día tras día.
    Perdóname que no pudiera comentarte ayer.
    Eres muy generoso, amigo, y me encanta ver esos saludos, es un halago para mí. Y siempre, aunque esté triste, me haces esbozar una sonrisa.

    Me uno a tu deseo y pido que te traigan todo lo que tú desees.
    Qué suerte tengo de tenerte!!! Gracias.
    Y.....pon los zapatos....a ver qué pasa y me cuentas si?
    Muchos besicos.

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  4. Los niños pobres le dan más valor a las cosas.
    Disfruta más un niño pobre con un balón que un niño rico con una consola WII.
    Que dicho sea de paso, la mayor parte de los niños del mundo no saben que mierda es eso.

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  5. Hola amigo, al leer tu día de reyes he recordado mi niñez, cuando a mi amiga del alma cada año le echaban lo mismo, un pañuelo y un muñequito de chocolate que repartía conmigo, a mi me apenaba mucho la llegada de los reyes en casa de mi amiga y decidí… escribir en mi carta lo que yo quería para ella.

    Mi madre casi me mata, ella se pasaba todo el año comprando cosas para ese día, al final los reyes resultaban esplendidos, al menos eso me parecía a mi, pero lo de mi amiga no resulto, y mis reyes se negaron a traer un “extra “.

    Hoy he recordado y me sonreído con mi ingenuidad.

    Gracias por tus amables palabras en mi blog. Un beso. Lola

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  6. La actual situación de en que a los niños se les ahoga con regalos que matan su imaginación me da un poco de pánico. Veo en los hijos de mis amigos, no ilusión, sino exigencia dictatorial. ¿Cómo serán de mayores?

    Ojala, los niños vuelvan a ser niños y los Reyes como reyes más humildes y sensatos.

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  7. Los sueños de los niños, pienso,son todos iguales, entonces a iguales sueños iguales regalos. Pero vivimos en un mundo separados por el dinero. Así es la vida.
    Sol, un beso.

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  8. Es muy bonito creer en la magía de los Reyes Magos. Ilusionarse con esos pequeños regalos. Al fin y al cabo, esas cosas forman la esencia de la vida, y es importante no dejar de ser niño nunca.
    emilio, un abrazo.

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  9. Emibel, !gracias! es la única pelabra que conozco para agradecer el buen concepto que tienes de mí. Me alegro si alguna vez mis palabras ponen en tú boca una sonrisa.
    Sabes que le he podido a los Reyes? Pues que me permitan siguir abrochándome los botones de la camisa y consumir el año entero. Estoy seguro, que de antemanos, lo tengo concedido. Por optimismo que no quede.
    Un abrazo.

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  10. Yo tampoco sé lo que es una consola WII. Fuí un niño pobre, con suerte, de caballo de cartón y caramelos. Pero, !con cuanta ilusión recibiamos los pobres y escasos regalos!
    JOSE, un saludo, y muchas gracias por tú visita.

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  11. Tus palabras me han hecho recodar que las madres, en las familias más pobres, se pasaban medio año guardando cositas para que los niños tuvieran reyes, aunque sea un poquito de chocolate, caramelos y unas galletas.
    Tierno y bonito gesto el que tuviste con tú amiga. La solaridad es hermosa, pero cuando se da entre niños, llega al alma.
    Lola, un beso.

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  12. Sí, el exceso de regalos mata la imaginación, y el niño va perdiendo el interés hasta por los más intesantes juguetes. Además hay padres muy egoistas, creo que muchas veces compran juguetes no pensando en los niños precisamente, sino pensado en ellos. Lo niños exigen y los padres imponen, mientras los hijos son pequeños claro, luego...
    Uno, un abrazo.

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  13. Ojalá la magia de los Reyes de Oriente hiciera que no hubiera niño en la Tierra que se quedase sin su juguete. Que todos los juguetes sirvieran para potenciar la imaginación y la fantasía de los niños, que les hiciera moverse de los sillones, sociabilizarse con otros niños, que no les provocara frustración ni les inyectara en vena la competitividad....

    En fin, que los juguetes dejasen a los niños ser niños.

    Un beso grande

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  14. Siempre me ha dado que pensar cuando un niño le dice a otro: "Mis reyes son mejores que los tuyos" Ya esta establecida la diferencia y la competitividad.
    Es una pena que los sueños mágicos de la niñez duren cada vez menos.
    silver¨smon, un beso.

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