Se dice que una buena
imagen vale por mil palabras. Quizás esta escena de calle no valga tanto, sin embargo,
contiene tantos datos que no es necesario presentarla acompañada de texto. Basta
observarla para que cada uno saque sus propias conclusiones y le ponga el pie
de foto que más le guste. Y, seguro, seguro que será acorde con sus
sentimientos.
Para mí tiene el
valor de los recuerdos y de la historia gráfica de otros tiempos.
Una escena callejera, los vecinos que charlan, el vendedor de globos y su canasta de qué? tal vez de pasteles. Unos miran otros sonríen y la vida quedó grabada en ese instante. ¿Tal vez sería domingo? Quién sabe.
ResponderEliminarRecuerdos, simples recuerdos que marcan un tiempo pasado.
mariarosa
Apacible y una tranquila tarde de verbena en dónde todos quieren pasárselo bien. Los globos le dan un bello colorido. Los recuerdos son totalmente subjetivos.
ResponderEliminarBss
Me quedo con lo mejor de la foto: el cesto de chuches y los globos; que seguro que hicieron felices a unos cuantos niños.
ResponderEliminarUn beso
son muchas escenas en una sola,
ResponderEliminarinteresante
saludos
Al parecer, los globos (deberían ser llenados con helio),solo eran para ser enganchados a las camisas donde se habían prendido tantas medallas, el nostálgico falangista y otros/as que no se ven, que acudían al acto político y que las sujetarían para que no se les cayeran al suelo.
ResponderEliminarPor lo demás, ese buen señor y sus acompañantes, posiblemente ya serán unas momias que llevaban camino de serlo.
Lo mismo pensaría de otro/as en similares situaciones, que entonces no, pero que ahora sí se dan a las puertas de otros mítines, pero de signos contrarios con el puño en alto y cantando la internacional.
Muy agudo amigo Diego al no posicionarte.
Me quedo con los globos y la tarde tranquila. Lo demás es pura caspa nacional que ya no está. Aunque en otros países está volviendo la extrema derecha.
ResponderEliminarUn abrazo de Mos desde la orilla de la spalabras.
Me quedo con los sempiternos globos y la cháchara con las dos mozas. Bss.
ResponderEliminarUna tarde de primavera de charla alegre y distentida.
ResponderEliminarAhora que me fijo...entre las medallas y la chapa del cinturón, parece el chatarrero...
Besos Disan.
Esta foto es un testimonio.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Vaya! Todos nos pegamos por los globos y las chuches... y es que en el fondo somos como niños.
ResponderEliminarBesos.
:-) Creo que lo que más nos gusta de la escena de un día tranquilo, son los globos que alegran el día y el cesto con chuches para endulzarlo. La sonrisa del señor.
ResponderEliminarEl cartel y el falangista con su montón de medallas dan un poco de grima.
Disancor, siempre al acecho de una buena foto.
Saludos y un fuerte abrazo Disancor
Una foto parecida a esa, en España, ya no sería posible hacerla, porque ya no se encontrarían algunos elementos de los que se ven en la escena. Las costumbres son otras, y también las ideas.
ResponderEliminarmaríarosa, un beso.
Las cosas tienen que haber sucedido para poder contarlas como recuerdos, y ahí esta lo subjetivo, en la forma de narrarlas. La foto de la entrada me pareció simpática porque hay cosas chocantes para estos tiempos. Es una de esas fotos que tienen interés y no se sabe por qué.
ResponderEliminarKaty, un beso.
Imagino que ya no se ven muchos vendedores de globos y chucherías con un cesto de mimbres, ni hombre tan uniformado y condecorado como el que se ve en la foto. Son detalles donde se nota lo que han cambiado las cosas.
ResponderEliminarMaría, un beso.
Buscando, buscando detalles se puede componer un texto con una buena cantidad de palabras, y todo sin ni siquiera conocer la historia entera. Es una de esas imágenes que hablan por si solas.
ResponderEliminarenletrasarte, Omar, un saludo.
La persona de los globos y el cesto de mimbres, era una señora que mal vivía con esas cosas. Ella, el hombre de las condecoraciones y el cartel del fondo, me sugirieron la foto. Y la verdad, aún sin ser una imagen con mucho mérito, ya antes de hacerla me pareció interesante. Antes y ahora, sólo me ha movido el interés de la escena.
ResponderEliminarAnónimo, un abrazo.
Yo también veo la tranquilidad de la escena y el colorido de los globos. Y mirándolo bien, es lo impactante de la foto; y lo llamativo, las condecoraciones.
ResponderEliminarMos, un abrazo.
Pues sí, lo más animado, la charla de los jóvenes, y lo más simpático, el colorido de los globos. El conjunto de la escena es una agradable tranquilidad. Siempre me gustó fotografiar escenas de calle.
ResponderEliminaremejota, un abrazo.
No me negarás que el hombre uniformado y lleno de medallas, da la impresión de sentirse muy orgulloso de su estampa. En conjunto es una foto muy curiosa y colorida.
ResponderEliminarion-laos, un beso.
Sí, esta foto es un testimonio con más de treinta años. En tiempos que todavía se estaba consolidando la democracia y los partidos políticos tomaban posiciones.
ResponderEliminarAntorelo, un saludo.
Es verdad, todos nos inclinamos por los globos y las chucherías, y es que aunque seamos mayores siempre nos quedan pensamientos y deseos de niño, y eso no lo cambian ni los tiempos.
ResponderEliminarTeresa, un beso
La foto que publico en la entrada forma parte de una secuencia de cuatro imágenes, y, precisamente, esta no es la mejor. Si encuentro las otras, prometo publicarlas otro día. Forman parte de una curiosa escena.
ResponderEliminarIsa, un abrazo.
Es tranquila esa tarde, se respira paz, aunque parece que es alguna celebración por lo de los globos, pero todo es pacifico porque el policía tiene la mano en el bolsillo y eso es síntoma de que no hay nada que temer.
ResponderEliminarBesitos.
Como cambia todo, antes un niño era feliz con un globo, ahora si el globo no lleva batería no es interesante, nos estaremos perdiendo algo.
ResponderEliminarUn besito.
La celebración consistía en un mitin político que se celebraba en un cine que había en la acera de enfrente. A estos acontecimientos la gente ya estaba acostumbrada y lo veía con toda naturalidad.
ResponderEliminarcampoazul, un beso.
Pues, es verdad, a los niños ya lo que le hace más ilusión ha de llevar pilas. Antes se conformaban con un globo lleno de aire, ahora tiene que ser de avión para arriba.
ResponderEliminarODRY, un beso.