No estaban los
tiempos como para llevar en la mano la botellita de agua de marca. Pero no
faltaban las fuentes, los grifos en las calles o vendedores con botijos de agua
caliente, y que te miraban preocupados si echabas un trago muy largo. Por las
dificultades con el agua, la gente era más de beber vino, que además de poner
alegre disimulaba el hambre. Y es que teníamos
una salud más bien de secano.
Foto de primero de
los 70.
Me gustaba encontrarme con esas fuentes...ahora es cada vez mas dificil
ResponderEliminarFeliz fin de semana
¿No serían botijos de agua fresca?
ResponderEliminarRecuerdo estas fuentes. En la calle donde trabajo hay una encima de un pedestal, a modo de figura.
ResponderEliminarBuen finde Disan, besotes grandes.
La foto es de premio.
ResponderEliminarUn abrazo
Recuerdos del pasado que regrearan al presente.
ResponderEliminarhttp://mjralonso.blogsot.com este es mi blog mis cosas, la respuesta a parece mjesus, es otro capricho de boogle Un abrazo
bien, parece que blooger esta jugando conmigo, no se publico mi respuesta. Decia la foto del agua recuerda el pasdo, pero regresa al presente. te dejo la direccion de mi blog http://mjralonso.blogspot.com un abrazo
ResponderEliminarRecuerdos de aquellas Fuentes de escasa, pero potable y rica agua.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ahora no nos atrevemos a beber en las fuentes y los grifos de las calles como se hacía antes. Y si no tienes dinero para comprar agua pasarás sed, porque si pides un vaso de agua en un bar lo mismo te dicen que venden botellas y que del grifo no hay.
ResponderEliminarJuanjo, un abrazo-
La verdad que los botijos de barro hacen un agua muy fresquita, pero esta mucho más fresca la del frigorífico, La pena que todavía en aquellos años no estaban al alcance de cualquiera, y teníamos que enfriar la botella de vino metiéndola en el agua del pozo. Cosas de los pueblos.
ResponderEliminarJuan, un abrazo..
Aquí, en Don Benito, hay algunas fuentes de hierro, pequeñitas y con grifo, en la calle principal, y de otros estilos en plazas y parques. Antes también las había, pero tenían otro cometido.
ResponderEliminarion.laos, un beso.
La foto es interesante por las necesidades y costumbres que había antes y las que hay ahora, Una botellita de agua para beber es tan cara como una de vino.
ResponderEliminarAntorelo, un abrazo.
Paso alguna vez que otra por tú blog, pero tengo problemas para escribir y pocas veces dejo constancia de mi paso. Te seguiré visitando porque tienes un espacio muy ameno e interesante.
ResponderEliminarMuchas gracias por tú presencia en CACHOS DE VIDA.
mjesus, un abrazo.
ResponderEliminarLo de la foto, es poco más que un grifo echando agua. Pero en fuentes, hay auténticas obras de arte repartidas por muchas poblaciones. Aunque ya sólo sean elemento decorativo en el paisaje urbano.
Pedro Luis López Pérez, un abrazo.
Afortunadamente aún existen estas fuentes al menos en los parques. Me encanta¡ verlas y a los niños bebr de ellas.
ResponderEliminarBss
Una foto de concurso, amigo Diego. Me gustan las fuentes, desde las más sencillas a las más artísticas y que el agua no sepa a cloro, no hay nada como una fuente de manantial, cayendo por la roca y un sediento bebiendo de ella
ResponderEliminarUn abrazo