NO DECLARARSE CULPABLE
Un día presencie un accidente de coche sin consecuencias
graves, pero con bronca. Un coche le pegó a otro en un ceda el paso. El
conductor responsable del porrazo salió del coche hecho una furia, gritándole
al otro conductor una gran retahíla de lindezas. Lo más suave, cegato e
irresponsable.
Le pregunté por qué
gritaba al otro si estaba claro que la culpa era suya. Me contestó de forma
confidencial y tranquilamente, que por muy clara que estuviera la cosa nunca
había que declararse culpable, pues no hay que olvidar la presunción de
inocencia, y la culpabilidad había que demostrarla. Hasta puede que un juez le
diera la razón. Quién sabe.
Me quedé pasmado. Ahora resulta que yo me había pasado la
vida haciendo el imbécil al declararme culpable cada vez que cometía un fallo.
Y allí lo deje dando voces al sorprendido conductor del
otro coche. Y no digamos como alucinaban las personas que vieron el accidente.
Se notaba que aquel hombre era veterano en conflictos y pleitos. Y para él
aquel pequeño contratiempo es como si formara parte de su trabajo. No sé en que
terminaría lo historia.
Acaba uno dudando de todo, y no estando seguro de lo que
ve ni de lo que oye. Puede que una mentira defendida muchas veces con ardor
acabe convirtiéndose en una verdad. Una frase parecida esta en la mente de
todos. No hay que olvidarla, es la sabiduría popular. Así que, ¡hala! a
discutir con razón o sin ella. Pero, al menos, evitemos las voces, los insultos
y las peleas. Seamos elegantes y serios discutiendo.
Pero, ¿cómo se discute con una
sonrisa en la boca?
Nunca terminamos de conocer la picarda de algunos tipos.
ResponderEliminarTe comprendo, soy de tu misma escuela.
mariarosa
Es difícil discutir con una sonrisa en la boca.
ResponderEliminarCada vez están más generalizadas la Mentiras en todo, lo que da pruebas de una sociedad inmadura y llena de prejuicios.
Un abrazo.
Posiblemente el chulo de la historia, porque no me cabe duda de que era un chulo mal educado, se topó con un hombre apocado.
ResponderEliminarPosiblemente el chulo de la historia, se topó con un hombre que no quería discutir.
Posiblemente el chulo de la historia era amigo de algún policía, o él era un policía.
Posiblemente el chulo de la historia, alguna vez se encontrará con la horma de su calzado.
Posiblemente..........
Parafraseando a Juan, posiblemente.............. el chulo de la historia era un mal político llamado Arturo Mas.
ResponderEliminarSuele ocurrir, siempre da voces el que tiene la culpa.Por eso se dice que si la culpa fuera mujer se quedaba soltera.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Hay cada elemento suelto por ahí!
ResponderEliminarsaludos
Creo que es futbolero: Aplica lo de "la mejor defensa es un buen ataque" :-)))
ResponderEliminarEl dicho está bien para no cargar a la gente de injurias falsas. El fallo esta en la misma justicia que, en algunos casos, tarda 10 o 15 años en dictar sentencia.
Un abrazo, Diego.
Miguel-A.
Eso es lo que se llama tener un morro así de grande. Más fresco que una lechuga el elemento ese.
ResponderEliminarBesos Disan.
Ya sabes
ResponderEliminaraplica la máxima de que
una buena defensa es un buen ataque.
Son seres sin escrúpulos.
Las cosas han cambiado tanto que no sabe uno ni reaccionar. Es mejor evitar cualquier tipo de discusión. Hace un par de años nos pasó, nos dieron un golpe y al bajar del coche el otro sacó una barra de hierro dispuesto a darle a mi marido por pedirle el seguro para dar un parte.
ResponderEliminarSonreír tampoco pero no sabe uno que clase de energúmeno te puedes encontrar.
Bss
Hola Disancor, muy bueno, como se discute con una sonrisa en la boca. Esto es imposible. Desde luego que cara dura la del conductor que da y monta ese pollo. En fin hay que valer para todo.
ResponderEliminarMuy bien redactado. El que da, siempre es el culpable se pusiera como se pusiera. Porque hay una cosa se llaman frenos y sirven para evitar el golpe. Tal vez el cegato era él y quiso disimularlo. Joooooooo, hay cada elemento por el mundo que es de risa.
Saludos y besos
Ya ves!! Aquí el más tonto siempre paga los platos rotos. Yo he conocido mentiras llevadas al tribunal y ganar, me pareció un mundo de locos pero está claro que el más fuerte y el que más grita normalmente siempre gana. ¡Qué asco, de verdad!
ResponderEliminarMe gusta tu nuevo look es suave y agradable.
Besitos.
Toparse con una de esas personas que no reconocen errores ni faltas, es todo un castigo. Creen que los demás son tontos y ellos perfectos. Y les expliquen las cosas como se las expliquen, a sus ojos van a tener razón siempre.
ResponderEliminarMaria Rosa Giovanazzi, un beso.
ResponderEliminarBueno, poder, se puede discutir con una sonrisa en la boca, pero siempre que uno sea un cínico, y esas personas tan desconsideradas dan muestras de serlo de lo más grande. Hay defectos que no están al alcance de cualquiera.
Pedro Luis ´López Pérez, un abrazo.
Sea como sea, chulos como el de la historia los puede haber en las familias más serías y en las profesiones de más prestigio. Y es verdad, si topan con una persona de poco espíritu, lo acogotan rápidamente. Lo malo es cuando topan con otro caradura como él, que chille más y tenga más mala leche.
ResponderEliminarJuan, un abrazo.
La verdad que la mayoría de los políticos son muy chulos y muy desconsiderados. A muchos los cogen cometiendo el delito y no se declaran ni presunto. Pero cuando los juzgan y los condenan, sus camaradas y ellos siguen diciendo que son inocentes,
ResponderEliminarDavid, un saludo.
ResponderEliminarPresenciando una bronca no sabe uno nunca quien tiene razón, si el que calla o el grita. Sobre todo en el momento de un porrazo con el coche. Y no pocas veces los conductores hasta se lían a mamporros.
Antonio, un abrazo.
ResponderEliminarHay personas que en su trato con la gente son educados y amables, pero cuando se ponen al volante de un coche se convierten en una fiera grosera y desconsiderada.
Antorelo, un abrazo.
ResponderEliminarEn el fondo, el conductor del relato tenía razón en eso de que la culpabilidad hay que demostrarla, sin embargo, yo creía que no hay que investigar nada en una cosa tan clara. Pero parece que estamos equivocados. Con lo que uno acaba dudando de todo.
Miguel A., un abrazo.
Esa persona daba la impresión que tenía mucha práctica en los pleitos y en los líos, o más bien parece que vivía de eso, y lo digo por la profesionalidad con que montó la bronca.
ResponderEliminarion-laos, un beso.
No todo el mundo vale para discutir sabiendo que no tiene razón. Esa falta de escrúpulos va incluida en su forma de ser y en su personalidad. Cada persona es como es, y no puede cambiar ni aún sabiendo que siendo de otra manera le iría mejor.
ResponderEliminarMTeresa, un saludo.
ResponderEliminarLa verdad que cuando surge un conflicto de tráfico es muy difícil acertar con la actitud adecuada para enfrentarse al problema. Hay personas con reacciones imprevisibles e incapaces de mantener un dialogo razonable.
Katy Sánchez, un beso.
Aquí lo que más desagrada es el descaro con que culpaba al otro conductor que no tuvo culpa del porrazo. Y en estos casos hasta el público que acude después del accidente, se pone de parte del que más grita. Y yo digo: cuando se comporta así, quizás alguna vez le haya dado resultado.
ResponderEliminarIsa, un abrazo.
ResponderEliminarLos jueces aplican la ley, pero interpretándola a su manera, porque la verdad que dictan algunas sentencias raras y chocantes, y no pocas veces dependen del dinero y la categoría del acusado, que hasta puede que sea culpable declarados inocente.
campoazul, un beso.